Para millones de mujeres, una identificación digital (ID) es más que prueba de identidad: es la clave para desbloquear la independencia financiera, la salud, la educación y las oportunidades económicas. Sin embargo, demasiadas mujeres, especialmente en países de ingresos bajos y bajos, aún enfrentan barreras para obtener una. Las leyes discriminatorias, las normas socioculturales y los desafíos económicos los mantienen excluidos, lo que limita su plena participación en la economía.
Pero las políticas correctas pueden cambiar eso. Cuando se diseñan teniendo en cuenta la inclusión, los sistemas de identificación digital pueden ser una herramienta poderosa para el empoderamiento de las mujeres, lo que les impide abrir cuentas bancarias, acceder a servicios gubernamentales y desarrollar futuros más brillantes para ellos y sus familias.
Este resumen de políticas explora los desafíos que enfrentan las mujeres para acceder a ID digital y destaca las soluciones que funcionan. Desde unidades de registro móvil hasta inversiones en infraestructura digital y políticas inclusivas de género, describimos los pasos clave que los formuladores de políticas y los reguladores pueden tomar para garantizar que los sistemas de identificación digital sean equitativos, accesibles y transformadores.
Las mujeres no pueden permitirse el lujo de quedarse atrás en la economía digital. Cerremos la brecha de género en la identificación digital.